miércoles, 17 de noviembre de 2010

La Espera

Desde la terminación de mi contrato en julio del 2009, las reiteradas llamadas al departamento de recursos humanos fueron numerosas. Mis compañeros y yo nos quedamos esperando una llamada de teléfono que nunca se produjo: NUESTRA INCORPORACIÓN.

De las 33 plazas de temporales, yo obtuve el puesto 18.

En Diciembre se habían incorporado en la plantilla hasta la plaza 17 y el resto...

A todo esto hay que decir que los hijos de empleados se incorporaron todos y los puestos Institucionales también.

Quedamos 16 empleados temporales, con plazas adjudicadas, en la calle y sin respuesta ninguna por parte de la empresa.

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